Zinman era conocido como el más destacado arquitecto del Castillo de Fuego Solar. – Sus conocimientos de la ciencia y el arte de la arquitectura no tenían rival. Sus diseños eran brillantes, su reputación excelente y su apariencia... digamos que Zinman no tenía tiempo para cosas tan mundanas. De no ser por la Gran Helada, sin dudas hubiera alcanzado un destaque cada vez mayor en su campo de estudio. – Mientras muchos de los antiguos colegas de Zinman se asentaron en las Colonias más cercanas, Zinman desapareció misteriosamente durante varios años. Cuando reapareció, se convirtió en un miembro fundamental de la poderosa Alianza del Amanecer. Bajo la protección de la Alianza, Zinman desarrolló nuevas técnicas de ingeniería defensiva y mejoras para el Calefactor de la colonia. Estas estructuras menos artísticas pero muy prácticas hoy lo llenan de orgullo.

Zinman rara vez habla de su familia, pero es bien conocida la súbita muerte de su hija. Siempre había sido su sueño ver un magnífico invernadero lleno de todo tipo de flores. Después de que Zinman pasara años argumentando a favor de este proyecto, el Presidente del Castillo de Fuego Solar finalmente lo aprobó. En el caos posterior a la Gran Helada se perdió casi una década de trabajo en el inconcluso invernadero.

Inicialmente, Zinman no pudo abandonar el invernadero soñado por su hija. Pero luego pudo ver la realidad y se dio cuenta de que en este mundo congelado, la mayor prioridad de todos es la supervivencia. – Los inventos de Zinman en el mundo posterior a la Helada incluyen refugios contra la nieve y kits de conversión para convertir pistolas de clavos en armas efectivas. A pesar de que está ayudando a muchos supervivientes con sus conocimientos, a Zinman lo persigue su fracasado intento de cumplir con la promesa a su hija.

Después de unirse a la Alianza del Amanecer como arquitecto jefe, Zinman volvió a sentir esperanza y propósito. Estaba contento de poder usar sus conocimientos de arquitectura para salvar incontables vidas, familias y colonias. Ver las sonrisas en sus caras le daba un enorme alivio a Zinman. Aún sueña en algún día poder construir ese invernadero, como acto de homenaje a su familia...

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